Hay una falsa creencia que puede hacernos pensar que la instalación de placas solares sólo es útil en primavera y verano, cuando hace sol, porque en otoño y en invierno no captan luz solar debido a que los días son más nublados y lluviosos. Pero es eso, falsa o equivocada, porque incluso en días nublados o de lluvia las placas siguen funcionando. Por lo que el propósito de este artículo es explicar cómo aprovechar al máximo la energía solar en invierno.
El motivo es el siguiente: el rendimiento de los paneles solares, obviamente, es mucho más alto en días soleados, siempre y cuando no haya obstáculos que dificulten la captación de la luz del sol y los paneles están instalados con cierta inclinación, no paralelos a la superficie. A lo que hay que añadir que en verano hay más horas diurnas y, por lo tanto, de luz solar porque los cielos están habitualmente más despejados la mayor parte de los días.
Sin embargo, en invierno sigue habiendo luz, aunque con los nublados y las lluvias, en menor cantidad. Es decir: las instalaciones solares para autoconsumo rinden menos en otoño y en invierno, pero siguen generando electricidad porque no necesitan luz solar directa, captan la llamada luz solar o radiación difusa.
Así que, en Podo vamos a detallarte un poco más cómo sacar el máximo rendimiento de la energía solar en invierno para seguir ahorrando en otoño e invierno en tu factura de la luz si tienes una instalación de autoconsumo solar.
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Cómo funcionan las placas fotovoltaicas
Los paneles solares o placas fotovoltaicas captan las radiaciones solares para transformarla en electricidad de corriente continua. Esa corriente, gracias a un inversor, transforma la energía generada de corriente continua a corriente alterna, para que pueda ser usada en el circuito eléctrico habitual de una vivienda o negocio. A pesar de que hay muchas dudas sobre la fiabilidad de las placas solares en invierno o cuando no hay sol, de eso no hay que preocuparse porque hay diferentes soluciones y tipologías de instalaciones.
Por un lado, están las Instalaciones que dependen de una batería de almacenamiento instalada en tu vivienda, donde se acumula la energía producida no consumida directamente y que podrás utilizar cuando te haga falta.
O, aún mejor en cuanto a fiabilidad, nosotros recomendamos las instalaciones que tienen conexión constante a la red eléctrica y cuando hay más demanda de energía de la que se ha producido, simplemente se adquiere energía de la red. O sea, la misma red será tu batería de almacenamiento para la demanda y/o remisión de tus excedentes, todo controlado a través de tu contador inteligente.
Para rentabilizar al máximo tu producción y consumos, existen las baterías virtuales, que son una hucha donde se acumula los excedentes de energía producida por las placas solar y que se descontará en euros en tu factura.
Es decir, si produces más energía de la que consumes, se almacenará en la batería virtual y se descontará en tu factura de la luz. La energía que sobra de tu consumo en un día de tus placas se compensará en el total de tu factura.
Este proceso sigue funcionando también en la temporada otoñal e invernal. Pese a que no tendrá el mismo rendimiento que en los días soleados, los cálculos son que la producción de electricidad se reduce: generan en torno a un 30%-50% en días nublados y un 10%-20% cuando llueve de manera intensa.
Igualmente, debido a que en invierno hay menos horas de luz al día, la generación de electricidad con la energía solar fotovoltaica dura menos tiempo. Eso sí, las bajas temperaturas en invierno aportan la ventaja de que los paneles no se van a sobrecalentar, por lo que, en ese sentido, su rendimiento no empeora.
Para rentabilizar tu consumo, aprovecha los excedentes para descontarlo en euros de tu factura.
3 consejos para aprovechar la energía solar en invierno
Por ello, lo importante, sabiendo que en todas las horas del día se genera energía eléctrica, es saber cómo sacar el máximo rendimiento de la energía solar en invierno. Estos consejos son para los consumidores, pero antes hay que valorar las siguientes cuestiones relativas a cómo afectan las condiciones meteorológicas adversas o la presencia de aves a las instalaciones solares:
- En primer lugar, las instalaciones son seguras y resistentes a temporales de viento, sobre todo teniendo en cuenta que en España no hay huracanes, tifones ni fenómenos tan extremos.
- En segundo término, los paneles están diseñados de manera que los pájaros no construyen sus nidos en ellos, por lo que no hay peligro de que se dañen por su culpa.
- Y, en tercer lugar, la superficie de las placas facilita que la suciedad ambiental se vaya eliminando por sí sola, también cuando llueve o cuando nieva. Estos tipos de precipitaciones no repercuten de manera negativa en el rendimiento de la energía solar en invierno. Y el impacto del granizo no daña los paneles solares, un aspecto en el que se pueden proteger las placas con una cubierta de protección que reduce la velocidad del granizo y romperá los más grandes.
Instala las placas solares con cierta inclinación
El rendimiento óptimo de las placas solares comienza con su diseño y fabricación, como hemos explicado en el apartado anterior. Y prosigue con el primer paso de la instalación: las placas solares deben instalarse con una cierta inclinación, no paralelas al suelo. Así, los paneles funcionan en días nublados porque captan la radiación difusa del sol de manera más óptima.
Este punto lo tendrán en cuenta los instaladores cuando vayan a tu vivienda, edificio de viviendas o empresa. Sin embargo, no está de más que lo sepas de manera previa.
Limpia la nieve que quede en los paneles solares
La lluvia no se va a acumular en las placas fotovoltaicas y no afectará en nada a su rendimiento ni a su seguridad, son instalaciones totalmente seguras y los fabricantes ya tienen en cuenta la lluvia a la hora del diseño para que no haya cortocircuitos ni peligros.
Como consumidor de energía solar en invierno, si vives en zonas de montaña o, si simplemente nieva en alguna ocasión, solo debes tener la precaución de limpiar la nieve que quede en los paneles. De esta manera, como medida preventiva y antes de esperar a que se derrita, maximizarás el rendimiento de los paneles solares en invierno.
Revisión de la instalación para quitar suciedad y comprobar los soportes
Las otras dos cuestiones relativas al mantenimiento de las placas solares en invierno tienen que ver con hacer alguna pequeña revisión para quitar la suciedad que pueda acumularse -por ramas caídas, por ejemplo- y comprobar la seguridad y estabilidad de los soportes tras días de mucho viento.
En realidad, las instalaciones fotovoltaicas necesitan pocas revisiones, más allá de las recomendadas por las empresas fabricantes. Pero debido a las condiciones meteorológicas del otoño y del invierno, si eres usuario de energía solar para autoconsumo, puedes asegurarte de su buen estado en alguna ocasión después de temporales con rachas de mucho viento. Aun así, debes conocer que todas las instalaciones solares tienen un controller que refleja su eficiencia,
En el caso de una vivienda unifamiliar, lo podrás hacer tú o la empresa instaladora si no quieres subir a donde están instaladas, pero si perteneces a una comunidad de autoconsumo colectivo, será la persona encargada de la administración quien lo haga en nombre de todos los usuarios conectados, agilizándose así los trámites.
¿Es rentable la energía solar fotovoltaica en invierno?
Ya hemos explicado que las placas solares funcionan en días nublados y de lluvia porque captan la luz difusa del sol, no la luz directa, por lo que generan energía eléctrica limpia en estas condiciones. Es decir, que si te preguntas si es rentable la energía solar fotovoltaica en invierno, la respuesta es que sí.
Lo que sí es cierto es que baja su producción y rendimiento, no por fallos en los paneles, sino porque la cantidad de luz captada y el número de horas de sol son menos en invierno que en verano. Aun así, la energía solar fotovoltaica sigue siendo rentable en otoño y en invierno para los usuarios del autoconsumo energético, regulado por el Real Decreto 244/2019, de 5 de abril.
Solo hay que seguir los consejos sencillos que te hemos aportado en Podo para aprovechar al máximo el rendimiento de la energía solar en invierno. De esa manera, aunque baje la producción, podrás seguir sacándole rendimiento los 365 días del año durante los más de 20 años de vida útil de una instalación solar.
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Referencias:
19 abril, 2023