A medida que la adopción de la energía solar como forma de generación de energía continúa creciendo, surge la necesidad de adoptar soluciones más efectivas para almacenar el excedente de energía generada. En este sentido, las baterías solares, tanto físicas como virtuales, desempeñan un papel fundamental.
En este artículo te contamos las diferencias entre ambos tipos de almacenamiento y exploramos si es práctico y beneficioso combinarlas para optimizar el uso de la energía solar en el hogar y, de esa forma, ahorrar en la factura de la luz.
Resumen:
¿Qué es una batería solar?
Una batería solar, también conocida como batería fotovoltaica, es un dispositivo que almacena la energía eléctrica generada por los paneles solares durante las horas de máxima irradiación solar para su uso posterior. Estas baterías son esenciales en sistemas de energía solar, especialmente en instalaciones no conectadas a la red eléctrica o en sistemas con conexión a red que buscan una mayor independencia y eficiencia energética.
Durante el día, los paneles solares convierten la luz solar en energía eléctrica, que no solo puede ser utilizada inmediatamente por los diferentes dispositivos del hogar, sin que también, puede ser almacenada en baterías para su uso posterior o puede ser enviada a la red eléctrica con el fin de obtener descuentos en la factura de luz.
¿Qué tipos de batería solar existen?
En el mundo de la energía solar, las opciones de almacenamiento de energía se clasifican generalmente en dos categorías principales: baterías físicas y baterías virtuales. Cada tipo tiene sus características y aplicaciones específicas que las hacen adecuadas para diferentes necesidades y situaciones.
Batería solar física
Las baterías solares físicas son dispositivos tangibles que almacenan energía eléctrica generada por paneles solares. Están diseñadas para retener esta energía hasta que se necesite, como durante la noche o en días nublados cuando los paneles no pueden generar electricidad. Los tipos más comunes de baterías físicas incluyen:
- Baterías de plomo-ácido: Las más utilizadas ya que son muy económicas. Son adecuadas para sistemas de almacenamiento de gran escala pero con una vida útil más corta y necesidades de mantenimiento más altas.
- Baterías de iones de litio: Más ligeras y con una mayor densidad energética, ofrecen una vida útil más larga y son más eficientes en términos de espacio y energía, aunque suelen ser más caras.
- Baterías de flujo: Un tipo de baterías menos común pero que son calificadas como ideales para almacenamiento a gran escala, gracias a su capacidad para retener grandes cantidades de energía durante periodos de tiempo largos..
Estas baterías son una solución robusta para quienes buscan una independencia energética completa, permitiendo un uso energético autónomo y constante sin depender de la red eléctrica.
Batería virtual
A diferencia de las baterías físicas, las baterías virtuales no implican un dispositivo físico de almacenamiento en tu hogar. Estas funcionan de forma muy sencilla: la energía que no se consume y que es producida por los paneles solares se envía a la red eléctrica general. En vez de almacenar físicamente esta energía, se contabiliza como créditos energéticos o compensaciones económicas que se aplican a tu factura de luz. Este sistema es especialmente ventajoso para quienes generan más energía de la que consumen, permitiendo una reducción significativa en los costes mensuales de electricidad.
Con Podo, por ejemplo, los usuarios con tarifa de autoconsumo solar pueden disfrutar de baterías virtuales que compensan los excedentes generados a precios de mercado, lo cual se traduce en ahorros directos en la factura de luz. No hay necesidad de preocuparse por el mantenimiento o la depreciación de la capacidad, ya que la «batería» es en realidad un ‘registro’ que refleja tu producción y consumo de energía.
Comparativa entre baterías solares físicas y virtuales
Cada uno de los dos tipos analizados ofrece beneficios específicos y, a su vez, puede presentar ciertas limitaciones. A continuación, exploramos las diferencias clave entre estas dos opciones en términos de costes, mantenimiento, duración y sostenibilidad.
Batería física | Batería virtual | |
Costes | Implica una inversión inicial significativa para la compra e instalación. | Totalmente gratuita en Podo. |
Mantenimiento | Requiere mantenimiento periódico para asegurar su eficacia y prolongar su vida útil. | No necesita mantenimiento ya que es un servicio gestionado por Podo. No ocupa espacio físico ni requiere intervenciones técnicas en el hogar del usuario. |
Duración | Tiene una vida útil limitada dependiendo del tipo de batería y de cómo se utilice y se mantenga. | Su «duración» es indefinida, ya que depende más de las condiciones del contrato que de factores físicos o técnicos. |
Sostenibilidad | Al almacenar energía solar directamente, estas baterías ayudan a maximizar el uso de fuentes renovables y reducir la dependencia de energías no renovables. | Al permitir que los excedentes de energía se vuelquen a la red eléctrica, las baterías virtuales no solo optimizan el uso de la energía solar generada sino que también contribuyen a la estabilidad y sostenibilidad de la red eléctrica general. |
En suma, ambas opciones tienen sus ventajas, y la elección entre una batería física y una virtual dependerá de las necesidades específicas del usuario, su presupuesto, y sus objetivos de sostenibilidad y autonomía energética. Mientras que las baterías físicas son ideales para aquellos que buscan una independencia total y están dispuestos a hacer una inversión inicial, las baterías virtuales son una opción accesible y sin complicaciones para quienes desean aprovechar la energía solar sin la necesidad de instalaciones físicas. Pero, ¿has pensado en la posibilidad de combinar ambas en tu sistema fotovoltaico?
¿Se puede combinar una batería física con una batería virtual?
La integración de baterías físicas y virtuales en un solo sistema fotovoltaico representa una solución híbrida que puede ofrecer lo mejor de ambos mundos, maximizando la eficiencia y la flexibilidad en la gestión de la energía solar. Esta combinación es no solo posible sino también beneficiosa bajo ciertas condiciones. Veamos cómo funcionaría y qué ventajas podría aportar.
Al combinar una batería física con una virtual, puedes almacenar el excedente de energía solar generada directamente en la batería física para uso inmediato durante las horas sin sol, como por la noche o durante días nublados. Mientras tanto, cualquier energía adicional generada que no se almacene físicamente puede ser enviada a la red, acumulando créditos o compensaciones a través de la batería virtual.
Esta estrategia permite una gestión de energía más flexible y optimizada para cubrir las necesidades diarias de energía, asegurando que la energía más costosa de la red se utiliza lo menos posible. Asimismo, al enviar los excedentes a la red cuando la batería física está llena, se garantiza que toda la energía producida se utiliza de manera efectiva, ya sea directamente o mediante compensaciones.
Ventajas de combinar los dos tipos de baterías solares
- La combinación proporciona una mayor independencia de la red, ya que la batería física ofrece un almacenamiento de energía accesible en cualquier momento, mientras que la virtual asegura que no se desperdicie energía.
- Permite aprovechar al máximo las tarifas de net metering o medición neta como la tarifa de autoconsumo con batería virtual gratuita de Podo, reduciendo aún más los costes de electricidad.
- En situaciones de exceso de producción o baja demanda, tener ambas opciones disponibles significa que siempre hay una forma de gestionar la energía de manera óptima según las circunstancias del momento.
- Combinar ambas tecnologías potencia el uso de energías renovables y contribuye a una menor huella de carbono.
En resumen, tanto las baterías solares físicas como las virtuales ofrecen soluciones eficaces para gestionar y maximizar el uso de la energía solar, cada una con sus propias ventajas. La posibilidad de combinar ambas tecnologías en un solo sistema fotovoltaico no solo es factible sino también altamente recomendable para aquellos que buscan optimizar su inversión en energía solar. Ya que esta integración permite aprovechar la capacidad de almacenamiento instantáneo y la gestión eficiente del excedente, resultando en una solución más sostenible y económicamente ventajosa.
En cualquier caso, la elección entre baterías físicas, virtuales o una combinación de ambas dependerá de tus necesidades específicas y de tus objetivos de sostenibilidad. Si quieres saber más sobre cuál es la opción que mejor se adapta a tu estilo de vida, no dudes en consultarnos, estaremos encantados de asesorarte.
11 abril, 2024